El Líquido Refrigerante, también llamado Anticongelante, tiene por objetivo principal reducir el calentamiento del Motor ya que favorece la liberación de calor a través del Radiador. Por lo anterior, prescindir de este elemento o mantenerlo en niveles bajos, puede ocasionar graves daños al Motor de tu Vehículo.
Entre las principales consecuencias de no contar con los niveles óptimos de Anticongelante se encuentran:
Para detectar su nivel, debes realizarlo con el Motor frío y en una superficie llana o plana. Posteriormente, ubica el depósito de este líquido, que normalmente se encuentra bajo el Capó. Una vez hallado el depósito, asegúrate de que el nivel esté entre el máximo y mínimo que están marcados en el mismo.
Para detectar una posible fuga, llena el depósito al nivel de las marcas establecidas y conduce de manera regular. Al final del traslado, revisa nuevamente el nivel del Líquido Refrigerante y si notas una disminución marcada o significativa, es momento de acudir a una Revisión con tu Distribuidor Ford, donde especialistas llevarán a cabo una inspección.
Otros indicadores de falta de Anticongelante en tu Vehículo son:
Entre las principales causas de este tipo de fallas se encuentran:
Recuerda revisar regularmente el nivel de Anticongelante y acudir a tu Distribuidor Autorizado Ford en los períodos que indica el Manual de Propietario para añadirte al Programa de Mantenimiento. Con esta acción, tu vehículo recibirá la atención necesaria de parte del grupo de expertos de Ford.